jueves, 26 de enero de 2012

Los bebés leen los labios para aprender a hablar

Un grupo de científicos de Florida ha revelado que los bebés no sólo aprenden a hablar y comunicarse por los sonidos que escuchan, sino que también por leer los labios de las personas que tienen cerca, en este caso mamá, papá y hermanos.

Los investigadores norteamericanos descubrieron que a partir de los seis meses los bebés comienzan a cambiar la mirada y a estudiar el movimiento de los labios de las personas que hablan a su alrededor
Es en la etapa que pasan del balbuceo o decir palabras incoherentes porque solo son sonidos a decir las primeras palabras típicas que todos queremos oir por primera vez: Mamá o papá.

“Para poder imitarte, el bebé tiene que entender cómo mover los labios para hacer el sonido que está escuchando”, explicó el psicólogo David Lewkowicz, de la Universidad Florida Atlantic, quien dirigió el estudio.

De acuerdo al estudio, los bebés no demoran mucho tiempo en conocer los movimientos que coinciden con los sonidos básicos que oyen, por lo que les es más fácil aprender a hablar. Ya lo sabes, si quieres ayudar a tu bebé a que comience a hablar o comunicarse más pronto ayúdale, hablándole siempre de frente y no muy rápido para que vaya observando cómo mueves la boca y así aprender.

Fuente: http://www.clubparenting.com/los-bebes-leen-los-labios-para-aprender-a-hablar.html?utm_source=newsletter120126&utm_medium=mail&utm_campaign=blog4

miércoles, 25 de enero de 2012

Segundo embarazo: preguntas frecuentes

Segundo embarazo.
En el segundo embarazo la mamá está más y mejor preparada, aunque aparecen nuevos contratiempos. ¿Qué cambiará?

Hay dos cosas que las futuras mamás, embarazadas de su segundo hijo, deben tener en cuenta:

• Tras el primer parto, el cuerpo de la mamá experimenta diversos cambios que han de facilitar los futuros embarazos y partos.

Los tiempos de adaptación del cuerpo de la mujer se reducen a la mitad, los trastornos típicos del embarazo disminuyen, los tejidos son más elásticos, queda la movilidad ósea, el cuello del útero es más blando y los tiempos de la expulsión también se reducen, prácticamente, a la mitad.

• Si el médico no indica lo contrario, en el segundo embarazo no tienen por qué repetirse las complicaciones sufridas en el primer embarazo o un parto difícil.

El dolor de espalda, la sensación de náuseas, la duración del trabajo del parto, la cesárea… es posible que sean totalmente diferentes en el segundo embarazo.

Las diferencias entre el primer y el segundo embarazo, las preguntas más frecuentes:

¿La barriga crecerá antes?

Sí. Los músculos del abdomen están un poco más relajados y, por lo tanto, se adaptan enseguida a las modificaciones del embarazo.

En una mujer primeriza, la barriga no es evidente hasta el quinto o sexto mes; mientras que en el siguiente embarazo, es posible que la barriga se note alrededor del tercer mes o al inicio del cuarto.

¿El útero es más grande?
No. El útero no aumenta de tamaño tras el primer embarazo. Con el segundo hijo, el tamaño del útero aumentará mes a mes, gradualmente, exactamente igual que la primera vez.

¿Tendré los mismos trastornos en el segundo embarazo?
Sí y no. Las náuseas y el dolor de espalda probablemente se repetirán en el segundo embarazo, dado que se trata de trastornos relacionados con los cambios que se producen en el organismo femenino durante la gestación.

En cambio, si la primera vez se produjeron problemas serios, como la gestosis, no tienen por qué repetirse necesariamente.

¿Cuándo notaré los movimientos del feto?
En el segundo embarazo los movimientos del feto se notan a partir de la semana 14 de embarazo, mientras que la mamá primeriza no los experimenta hasta las semanas 20 o 22. En el segundo embarazo, la mamá ya ha experimentado esta sensación y es capaz de reconocerla inmediatamente.

¿Nacerá en la misma semana de embarazo?
Los factores que influyen en la duración del embarazo pueden variar en cada gestación. No obstante, si se trata del tercer o cuarto parto por vía vaginal, es más difícil que el cuello del útero se mantenga cerrado hasta el final e la gestación, y el pequeño, con toda probabilidad, nacerá antes.

¿Después de una cesárea, se puede dar a luz por vía natural?
Si la primera cesárea se realizó por un motivo circunstancial, el segundo parto puede ser perfectamente por vía vaginal. Si, después de la operación, no se ha producido ninguna complicación especial, la cicatriz no constituye por sí misma ningún obstáculo.

¿El trabajo del parto será menos largo?
En el segundo parto, el nacimiento del niño también implicará un cierto esfuerzo. Sin embargo, durará menos. Del mismo modo que será más breve la fase de expulsión, es decir, el parto propiamente dicho.

En general, si para un primer hijo pueden transcurrir incluso 24 horas desde el inicio del trabajo hasta el parto, para el segundo, el tiempo necesario se reduce a la mitad.

¿Volverá a ser necesaria la episiotomía ?
Antes, la episiotomía, es decir, la pequeña incisión para ensanchar la abertura de la vulva y permitir al niño salir más fácilmente, se practicaba a todas las mujeres.

En la actualidad, se tiende a efectuarla únicamente en los casos realmente necesarios. Sin embargo, si, en el transcurso del primer parto, se practicó, es probable que se deba recurrir a ella también en el segundo, ya que el tejido del periné es menos elástico y podría rasgarse.

¿Tengo que volver a asistir a un curso de preparación al parto?
Siempre es aconsejable. El hecho de haber vivido ya esta experiencia no exime de las tensiones emocionales. Además, se pueden dar situaciones diferentes en el embarazo o en el parto. Los cursos dedican un amplio espacio al ejercicio físico y a la relajación, para llegar al parto de la mejor manera.

¿Romperé aguas espontáneamente?
La rotura de aguas espontánea de las aguas es un episodio totalmente accidental y, si la primera vez el trabajo había comenzado de esta manera, esta situación no tiene por qué repetirse con el segundo niño.


martes, 24 de enero de 2012

Trucos para superar berrinches y rabietas

La rabieta es una reacción normal de los niños ante la frustración, pero debe corregirse lo antes posible.


Se tira al suelo, patalea, llora y grita sin parar. Las rabietas y los berrinches como respuesta a algún tipo de frustración se dan con mayor o menor frecuencia en los niños entre dos y cuatro años. Esta actitud, que puede hacer perder los nervios a muchos progenitores, más si tiene lugar en un espacio público, debe corregirse lo antes posible para evitar que se convierta en un arma en manos de los niños para lograr todo lo que se proponen.

A qué se deben las rabietas

Las rabietas son uno de los recursos que emplean los niños entre dos y cuatro años para expresar su frustración ante distintas circunstancias, ya sea porque algo no les sale como esperaban por no tener las aptitudes necesarias, porque se les impida hacer lo que quieran, estén cansandos o no se responda a todas sus demandas tal y como requieren.

El berrinche incluye, por lo general, gritos, llantos, pataleos, e incluso, algún que otro golpe. Por ello provoca el consiguiente nerviosismo y alteración de los padres. Si encima se desencadena en un lugar público y el pequeño molesta a otras personas con su actitud, la situación puede llegar a ser bochornosa.

¿Se pueden evitar los berrinches?

Rocío Ramos-Paúl, psicóloga y conductora del programa televisivo "Supernanny", señala que estas situaciones no son algo fuera de lo normal: "Se tienen que dar, puesto que los niños hacen estas cosas porque no saben contar qué les pasa". Por eso, la psicóloga apunta que la labor de los padres es "guiar su comportamiento y enseñar al niño que esa no es la forma adecuada de expresar su enfado, cansancio o malestar".

El objetivo debe ser que el niño comprenda que ni con llantos ni con pataleos se consiguen las cosas. De este modo, la principal premisa que deben atender los padres es no ceder, es decir, no claudicar y darle lo que pide para demostrarle así que su estrategia no funciona y que la próxima vez que la utilice ocurrirá lo mismo.

Estrategias para minimizar las rabietas

  • Ignorar: la ignorancia puede dar buenos resultados ante una rabieta, puesto que el niño sabe que si no tiene público que le observe, su efecto es nulo. Si el berrinche tiene lugar en el hogar, bastará con salir de la habitación donde esté el niño, no sin antes decirle que esa actitud es inadecuada y que volveremos cuando la finalice. Si está en un espacio público, se puede dar la espalda al pequeño para que se dé cuenta de que no consigue nada con la rabieta o moverle a otro lugar, en el caso de que moleste de forma significativa a las personas que le rodean.

  • El poder de las palabras: razonar con un niño en medio de una rabieta es una misión imposible; es muy probable que no escuche nada de lo que le digan. Sin embargo, una vez que termine el berrinche, se debe hablar con el pequeño sobre lo ocurrido y enseñarle que las cosas se pueden solucionar por caminos diferentes al pataleo. Si la próxima vez el niño opta por el diálogo en vez de por la rabieta, es fundamental felicitarle por ello.

  • Evitar situaciones peligrosas: los niños que abusan de las rabietas tienden a intensificarlas en determinadas situaciones, como cuando están cansados o tienen hambre. Los padres conocedores de esta circunstancia pueden evitarlas si al detectar estos síntomas en sus hijos les acuestan y les dejan descansar un rato o les dan de comer a la hora adecuada.

  • Más vale prevenir: el conocimiento de las reacciones de sus hijos puede ayudar a los padres a prevenir las situaciones de rabietas. Si ya saben que ante una orden o negativa determinada el niño responderá con un berrinche, es aconsejable anticiparse e intentar razonar con ellos antes. Si acudirán a una tienda donde hay golosinas y saben que el niño pataleará si no se le compra todo lo que pide, antes de entrar, se puede "negociar" con el pequeño que tan solo se le comprará una golosina y que, en caso de rabieta, no obtendrá ninguna.

Cuatro consejos imprescindibles

  1. Ante una rabieta, ambos progenitores deben responder por igual. Si uno cede, las estrategias no resultarán efectivas.
  2. Es preciso mantener la calma y no enfadarse y gritar. De ese modo, solo conseguimos que el niño vea que los padres emulan su actitud.
  3. Disculparse con las personas a quienes el niño molesta con su rabieta y hacer todo lo posible para que estas molestias se minimicen.
  4. Reforzar las actitudes positivas y premiar con gestos de cariño y reconocimiento cuando el niño evite por sí solo las rabietas y actúe de forma adecuada ante una frustración.

miércoles, 18 de enero de 2012

El segundo embarazo

Se te notará la tripa antes y sentirás más pronto las pataditas del bebé. Aunque ya hayas pasado por esta experiencia, ahora experimentarás emociones nuevas y algunos síntomas distintos

A tu favor tienes la experiencia que no tenías cuando eras primeriza. Y en tu contra, el cansancio que supone atender al primogénito, sobre todo si aún es pequeño. Además, si no has esperado los 18 meses recomendados por los especialistas entre embarazos, esta segunda gestación puede resultarte bastante agotadora.

Ahora más que nunca es importante que te cuides, no sólo para que el bebé crezca fuerte y sano, sino para que puedas disfrutar de tu estado y llegar al parto con la energía necesaria.

LA PREPARACIÓN EMOCIONAL

Con un niño en casa te será más difícil encontrar tiempo para ti, para hacerte a la idea de que vas a tener otro bebé, para hablar de tus miedos… Estas medidas te ayudarán a sentirte bien:

Ir a las clases preparto.
Aunque éste sea tu segundo embarazo, no creas que ya lo sabes todo. Compartir con la matrona y otras gestantes tus preocupaciones es tan necesario como la primera vez.

Salir con tu pareja.
Dejad de vez en cuando a vuestro hijo con algún familiar o con una canguro y salid en pareja. En esta etapa resulta fundamental que dediquéis tiempo a vuestra relación, a compartir ilusión y dudas, a pensar cómo os organizaréis cuando llegue el bebé...

Buscar tiempo para ti.
También es esencial que no te olvides de ti misma. Cuando tu hijo duerma o tu pareja esté con él, aprovecha para darte un baño o para tumbarte en la cama y relajarte pensando en el bebé que va a llegar y estableciendo una conexión especial entre vosotros.

Hacer ejercicio físico.
No hace falta que te canses; caminar media o una hora al día es suficiente para tener más energía, despejar tu mente y encontrarte animada. Y es que con el ejercicio físico se secretan endorfinas, unas hormonas que provocan sensaciones positivas.

Hablar con tu hijo.
Si le involucras en el embarazo lograrás que no se sienta desplazado. Hazle comprender que no vas a dejar de quererle y cuéntale que, como él es ya muy mayor, vas a necesitar su ayuda para cuidar al pequeño.

Fuente: http://www.crecerfeliz.es/Embarazo/Cuidados/El-segundo-embarazo

jueves, 22 de diciembre de 2011

Cuentis, cuentos personalizados
























¡Ya está aquí la pesada de la lectura! Pero es que los niños tienen que aprender a descubrir el placer de la lectura cuanto antes, mejor.

Mi recomendación de hoy es Cuentis, una empresa que hace cuentos personalizados. Habréis visto muchos en los que insertan la foto del niño, pero lo que hace Cuentis es diferente. Son cuentos que podemos escribir prácticamente nosotros.

Cada uno de los cuentos tiene zonas en magenta (que luego salen en el mismo color que el resto) para que en esos huecos podamos escribir lo que queramos. Podemos utilizar las sugerencias que ellos nos hacen o por el contrario adaptarlos a nosotros.

Su catálogo no es muy extenso, pero he estado echándoles un vistazo muy en profundidad (probablemente más adelante le regalemos alguno a las peques) y me gustan mucho tanto las ilustraciones como las historias.

Mi favorito es "De cómo Aldara se llamó Aldara" ... o Mencía, o Pepe, o Cristina... el nombre lo ponéis vosotros. La historia es monísima y las ilustraciones también.

Cuestan alrededor de 30 euros en los que ya están incluidos los gastos de envío.

Fuente: http://www.mamisybebes.com/2011/12/cuentis-cuentos-personalizados.html

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Portacubiertos y servilletero para la mesa de Navidad

Estos portacubiertos me vuelven loca… ¡Creo que mañana mismo probamos a hacerlos!

Se acerca la Navidad y -¡oh!- qué ilusionados y nerviosos nos ponemos todos, no sólo los niños… Papá Noel (Santa Claus en otras latitudes) está a punto de llegar con su HO-HO-HO-HO, y nosotros con la decoración navideña sin ultimar… Si necesitas todavía ideas fáciles, mira qué portacubiertos (o servilleteros) de cartulina para la mesa de Navidad puedes hacer como manualidades con niños antes del sábado.

¿No son supergraciosos? Pues busca recortes de papel de colores para reciclar o corre a la papelería del barrio a comprar cartulinas roja, verde y negra, y arreglátelas con purpurina (o simplemente papel plata de cocina) para forrar la hebilla del cinturón.

Tienes las explicaciones y el tutorial en un vídeo en el blog Stamp with Heather (muy mono, por cierto, otro día volveré a darme una vuelta por él…).

Ya voy con prisas para decorarlo todo y ponerlo diferente al año pasado… Menos mal que hoy me acordé de imprimir unas etiquetas para los regalos muy monas, que si no… (Venga, va… comparto: son del blog sass&peril y las puedes descargar aquí).

¿Qué tal ir haciendo estos trabajos de scrapbooking cantando…?

”Oh, jingle bells, jingle bells

Jingle all the way

Oh, what fun it is to ride

In a one horse open sleigh…


Recetas de Navidad para niños

Los más pequeños de la casa son quienes más disfrutan de la Navidad. Les encanta armar el arbolito, decorar la casa con motivos navideños, escribirle a Papá Noel y esperar sus regalitos y, por supuesto, degustar de las comidas típicas de esta celebración. ¿Quieres sorprender a tus niños en estas fiestas? En ElGranChef te traemos una recopilación de nuestras mejores recetas de Navidad para niños.

Recopilamos recetas de postres, helados y dulces para los chicos. ¡Seguro les encantarán! Vamos a preparar estas recetas de Navidad para niños... etc

Fuente: http://www.elgranchef.com/2011/12/01/recetas-de-navidad-para-ninos

miércoles, 14 de diciembre de 2011

Tarjetas, etiquetas y pegatinas de Navidad para imprimir‏

Hace unos días os mostramos algunas etiquetas de Navidad para poner en los regalos y hoy os mostramos nuevas tarjetas, etiquetas y pegatinas para Navidad realmente preciosas, creadas por Louma, del blog Amor maternal.

Se trata de tres páginas tamaño folio, siendo la primera un conjunto de doce tarjetas pequeñas con las que felicitar la Navidad, etiquetar regalos, decorar la mesa o lo que se os ocurra.

La segunda son 16 etiquetas, preparadas para ser impresas y recortadas, pudiendo hacer un agujerito en uno de los extremos para pasar una cuerdecita y etiquetar así nuestros regalos.

La tercera, finalmente, consta de 39 pegatinas redondas (interesante imprimirlas en papel con adhesivo), con la misma intención que el resto de imprimibles, decorar regalos o para los niños, para que jueguen con las pegatinas, que siempre es un buen ejercicio de psicomotricidad (cómo cuesta a veces levantar una pegatina con la uñita) y de creatividad, pegándolas allí donde a papá más le molesta, para que tenga que hacer uso del alcohol post-retirada (estoy siendo irónica, claro).

Para imprimirlas basta con hacer click en cada imagen para hacerla más grande y después imprimirla o bien pasar directamente por Amor maternal, donde Louma explica que son gratuitas, pero que si alguien quiere colaborar con la causa, y con otras causas, puede hacerlo.

A mí personalmente me han encantado. Son preciosas, originales y con mucho colorido, y precisamente por eso las he querido mostrar, son de Bebés y más, porque como elemento decorativo merecen la pena.

Spot Prepapá Rocky

Spot Prepapá Rocky from Cuatro Tuercas on Vimeo.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Tarjetas de Navidad imprimibles para identificar los regalos

Yo no sé vosotros, pero yo ya tengo en casa unos cuantos regalos si sumo los de mis hijos y los de mis sobrinos y sobrinas, todos ellos perfectamente envueltos para no tener ni idea de quién es cada uno.

Esto quiere decir que, sí o sí, hay que hacer algo para tenerlos identificados. Muchas veces hemos tirado de Post-its, pero tienen el inconveniente de que como trastees un poco los regalos se te pueden despegar.

También puedes simplemente poner el nombre directamente en el regalo, pero hay quien prefiere hacerlo un poco más estético, y para ellos pueden ser interesante estas tarjetas de Navidad, perfectas para identificar los regalos.

Hoy en día quien más quien menos tiene un ordenador y una impresora, así que con estas dos cosas, papel y tijeras, podemos imprimirlas, recortarlas, escribir en ellas y ponerlas en los regalos de nuestros hijos y familiares.

Las primeras que podéis imprimir son las que habéis visto en la imagen que encabeza esta entrada, sacadas de Momomushy. Son de agujerito, así que lo lógico sería ponerles una cuerdecita y pegarla a los regalos (con una pegatina de esas de “Deseo que te guste”, por ejemplo).

Evidentemente, también las podemos pegar directamente en el regalo, obviando el agujerito. Para imprimirlas no tenéis más que hacer click en la imagen para ampliarla:

Las siguientes son más simples: recortar, escribir y pegar. Nos las ofrece FreePrintables y para imprimirlas haremos click en la imagen siguiente, para llegar a su página e imprimir las etiquetas pulsando “Print Now!”.

Por cierto, para los próximos días id preparando cartulinas (tamaño folio, claro), tijeras y pegamento, porque llegan unos cuantos recortables para Navidad.

Fuente: http://www.bebesymas.com/recursos-en-la-web/tarjetas-de-navidad-imprimibles-para-identificar-los-regalos

sábado, 10 de diciembre de 2011

Bonitas tarjetas para identificar los regalos navideños




















tarjetas

Ya sabéis que por estas fechas os ofrecemos todo tipo de recursos, si es posible gratuitos, para que decoréis la navidad sin gastar dinero. Hoy os presentamos unas bonitas tarjetas para identificar los regalos navideños.

Se puede descargar gratis en formato pdf, se imprimen sobre una cartulina blanca para que queden más rígidas y sólo queda recortarlas. Si queréis se les puede hacer un agujero y pasar una cinta o bien pegarlas directamente sobre los regalos.

Otra idea que puede quedar muy bien es imprimirlas sobre papel autoadhesivo, recortarlas y crear así unas lindas etiquetas.

Espero que os gusten estas bonitas tarjetas para darles un toque de originalidad a los regalos navideños.

Fuente: http://www.bebesymas.com/recursos-en-la-web/bonitas-tarjetas-para-identificar-los-regalos-navidenos

martes, 29 de noviembre de 2011

Qué hacer cuando los niños se portan mal

Asunto crucial para todos los padres: ¿cómo actuar cuando los hijos se portan mal? ¿Qué hacer para que mejoren su conducta? Las respuestas a estas preguntas pueden hallarse al final de un largo camino, pero hay algunos conceptos básicos que conviene tener a mano. El principal, saber que la clave está, como en tantos otros aspectos, en el equilibrio: no caer en el exceso de permisividad, que deriva en pequeños egoístas desacostumbrados a recibir un "no", ni en el autoritarismo castigador, que puede lesionar su autoestima y hacerles creer que sus padres no les quieren.

Marcar normas de comportamiento desde el principio

El comportamiento de un niño se considera "malo" cuando, por defecto o por exceso, no se adapta a lo que se entiende como "normal". Los pequeños adquieren pautas de conducta a medida que crecen, en función de lo que ven y de su propia experiencia, es decir, de las respuestas que obtienen sus propios actos. Por eso es fundamental dar señales claras en los primeros años de vida.

Los padres tienen que cortar el problema de raíz y marcar unas normas desde que los hijos tienen menos de cuatro años

En palabras de Jordi Sasot, médico especialista en pediatría y psiquiatría infanto-juvenil y coordinador de la Unidad de Padiopsiquiatría de la Clínica Teknon de Barcelona, ante la pregunta de qué hacer cuando los niños se portan mal, la respuesta está clara: "Los padres tienen que cortar el problema de raíz y marcar unas normas desde que los hijos son pequeños, menores de cuatro años, y en pequeñas cosas".

"Cada problema -especifica Sasot- debe ser estudiado de manera individual para descubrir su origen, que puede ser educativo, con problemas de comportamiento, o biológico, con trastornos de conducta". En el segundo caso, relacionado con cerca del 40% de los niños hiperactivos, cabe la posibilidad de que el pequeño necesite tratamiento farmacológico porque su mala conducta responde a condicionantes con los que ha nacido.

Sin embargo, las causas del problema no siempre están fuera de la relación entre padres e hijos. En el caso de los "falsos niños con trastornos", los problemas de comportamiento tienen su origen en la sobreprotección de los padres, que solucionan los problemas que el niño tiene que resolver por sí mismo. "Si a los niños menores de tres años les dan de comer los padres, les permiten ir a la cama cuando quieren y les resuelven todos los problemas, no se les educa en la capacidad de frustración y los niños no toleran un 'no'. Este no es el camino correcto", apunta Sasot.

Disputas de poder

Los niños desafían a sus padres cuando no sienten satisfechas sus necesidades y buscan poder. Así lo asegura la pedagoga Elena Roger, quien explica el proceso de estas disputas: "Los padres repiten, recuerdan lo que deben hacer sus hijos, pero con resultados negativos. Luego negocian, razonan y sermonean sin éxito. Cuanto más repiten, más se enfadan, hasta acabar en gritos y amenazas, incluso en insultos y bofetadas. Cuando ya no pueden más, explotan diciendo cosas de las que luego se arrepentirán e infringiendo castigos desproporcionados que nada consiguen mejorar". Con el tiempo, estas rutinas pueden convertirse en patrones destructivos de comunicación, relación familiar y resolución de problemas, "en hábitos familiares que se consideran como la manera normal de convivir en casa".

Los castigos son solo una solución momentánea e inducen un aumento de la agresividad de los niños

Los castigos son contraproducentes en muchos sentidos. Primero, porque son solo una solución momentánea. Cuando el castigo cesa, el niño repite la conducta, perfecciona las travesuras y pierde sensibilidad ante las penalidades. Por otro lado, muchos padres, al notar que el castigo surte efecto en el momento en que lo aplican, tienden a castigar cada vez más y con mayor energía, lo cual los enreda en un círculo vicioso en el que todos pierden. Además, los castigos inducen un aumento de la agresividad de los niños, puesto que el modelo que se les inculca es: cuando estamos enfadados con alguien, es bueno ir contra él. En este mismo sentido, los castigos morales (hacerles sentir culpa) pueden hacer tanto o más daño que los físicos.

"Los hijos a veces nos ponen a prueba para mostrarnos que ellos han cambiado y que las normas, por lo tanto, también han de cambiar -agrega Elena Roger-. Nos desafían continuamente, nos provocan y muchos de ellos nos manipulan hasta llevarnos a su terreno. Entonces, ganan la batalla".

Sanciones, recompensas y alternativas

Lo adecuado es que, en vez de castigos, se apliquen técnicas de sanción con las que el niño advierta las consecuencias de sus actos y de las que solo él será protagonista. Si no hace caso a las normas, deberá aprender por sí mismo a resolver los problemas porque nadie los resolverá por él. Si no quiere comer, no se le ofrecerá otra comida hasta que no termine el primer plato servido. Y si no quiere ir a dormir a la hora que marcan los padres, él elegirá la hora, pero al día siguiente deberá levantarse para ir al colegio o hacer sus tareas como si se hubiera acostado temprano.

El objetivo de los padres es que sus hijos aprendan nuevas pautas de comportamiento para que, a largo plazo, varíen su conducta. Por este motivo, hay que buscar técnicas que consigan efectos duraderos, no momentáneos. "Las políticas de recompensa son las técnicas que nos van a servir para este objetivo de conseguir efectos estables", asegura Joan Romeu i Bes, especialista en neurología y psiquiatría de la Clínica Quirón y profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona.

Estas políticas se basan en el hecho de que las personas tendemos a realizar las cosas en las que hallamos un beneficio y evitar las que suponen un esfuerzo o una dificultad que no se recompensará. Cuando se habla de beneficio, no hay que pensar solo en bienes materiales. Romeu afirma que "las recompensas más eficaces son las más inmateriales: el elogio, la atención, el afecto y la compañía".

También se debe tener en cuenta no recompensarlo todo, "como a delfines de acuario". Es mucho mejor hacerlo de vez en cuando, para que el niño no pueda predecir cuándo se le premiará. En este caso, el premio ha de llegar en el mismo momento de la acción que se quiere premiar, porque de lo contrario, hay riesgo de que el niño no lo identifique.

Por último, en el caso de niños muy conflictivos en quienes sea muy difícil detectar conductas que compensar, la recomendación de los especialistas es conversar con los pequeños para informarles de lo poco apropiado que ha sido su comportamiento hasta ese momento y transmitirles conductas alternativas. Es decir: sin exaltarse ni gritar, los padres han de inculcarles nuevas prácticas. Con esta estrategia, además, se estrecharán los lazos entre padres e hijos.

Fuente: http://www.consumer.es/web/es/bebe/ninos/2-4-anos/2011/11/29/204978.php

lunes, 28 de noviembre de 2011

¿Cuál será el grupo sanguíneo de mi bebé?

A, B, AB, 0... El grupo sanguíneo de un bebé puede resultar sorprendente -incluso, inquietante- para los padres que desconocen o han olvidado los fundamentos de la genética. Es normal. Cuando el grupo de la madre es "A" y el del padre es "B", la lógica lleva a pensar que el niño pertenecerá a uno de estos grupos o, a lo sumo, a la combinación de los dos: "AB". Más difícil es imaginar que el bebé será "0", aunque es posible, e incluso, muchas veces sucede. Del mismo modo, también puede ocurrir que su Rh sea negativo, cuando el de ambos padres es positivo. Pero, ¿cómo puede ser? ¿Cómo se explica que una pareja cuyos miembros son A Rh+ conciba un hijo 0 Rh-? Y más todavía, ¿cómo es posible que haya hermanos con grupos sanguíneos diferentes entre sí?

Entender cómo funciona el grupo sanguíneo


Para entender estas cuestiones y evitar sobresaltos, hace falta repasar algunas leyes genéticas que, además de ser muy simples, obedecen a la lógica (aunque al principio parezca que no).

  • Lo primero que se debe tener en cuenta es que, en cada rasgo de nuestro organismo (como el color de los ojos, el color del pelo o la altura) siempre intervienen dos genes: uno procedente de la madre y el otro, del padre.

  • Lo siguiente es saber que esos genes pueden ser dominantes o recesivos, es decir, algunos tienen más "peso" o posibilidades de manifestarse que otros. El color de los ojos es un buen ejemplo de ello, porque se puede apreciar con facilidad. Si uno de los progenitores tiene los ojos claros y el otro oscuros, probablemente, el bebé los tendrá también oscuros. Sin embargo, en su información genética quedará "oculto" el gen de los ojos claros. Cuando ese niño crezca, sea adulto y forme una familia, sus hijos podrán tener ojos claros si su pareja también los tiene.

  • En el caso de la sangre ocurre igual, aunque no se aprecie a simple vista. Los genes "A" y "B" son dominantes y el gen "0" es recesivo, ya que indica ausencia de "A" y de "B". De esta manera:

    • Una persona "AB" tiene un gen "A" y otro "B".
    • Una persona "A" puede ser "AA" o "A0", pero siempre prevalecerá el gen "A" porque el "0", recesivo, no se manifiesta.
    • Una persona "B" puede ser "BB" o "B0", pero al igual que en el caso anterior, el gen "0" quedará solapado.
    • Entonces, una persona "0" tiene ambos genes "0" porque, si tuviera uno solo, no se manifestaría.
  • De este modo, cuando un padre "A" tiene los genes "A0", y una madre "B" tiene los genes "B0", sus hijos tienen tantas posibilidades de ser "A" como "B", "AB" o "0".

  • ¿Y en el caso del Rh? Es similar. Una persona con Rh negativo es necesariamente "- -", pero quien tiene positivo puede ser "+ +" o "+ -". Esto explica que unos padres con factor Rh+ puedan tener un bebé con Rh-. De hecho, cuando hay dos progenitores positivos "+ -", uno de cada cuatro hijos que tengan será negativo, "- -". Por esta razón, y por las combinaciones explicadas antes, a menudo sucede que el grupo sanguíneo no es el mismo entre hermanos.

Combinaciones que determinan el grupo sanguíneo

Pero entonces, ¿cuál será el grupo sanguíneo del bebé? Unas tablas muy sencillas ayudan a visualizar con claridad las posibles combinaciones.

El grupo sanguíneo:

Madre Padre Hijo
Grupo AB Grupo 0 Grupo A o B
Grupo A Grupo A, B o AB
Grupo B Grupo B o AB
Grupo AB Grupo A, B o AB
Grupo A Grupo 0 Grupo 0 o A
Grupo A Grupo A o 0
Grupo B Grupo A, B, AB o 0
Grupo AB Grupo A, B o AB
Grupo B Grupo 0 Grupo 0 o B
Grupo A Grupo 0, A, B o AB
Grupo B Grupo B o 0
Grupo AB Grupo A, B o AB
Grupo 0 Grupo 0 Grupo 0
Grupo A Grupo A o 0
Grupo B Grupo B o 0
Grupo AB Grupo A o B

El factor Rh:

Madre Padre Hijo
Rh - Rh - Rh -
Rh + (+ +) Rh +
Rh + (+ -) Rh + / Rh -
Rh + (+ +) Rh - Rh +
Rh + (+ +) Rh +
Rh + (+ -) Rh + / Rh -
Rh + (+ -) Rh - Rh + / Rh -
Rh + (+ +) Rh +
Rh + (+ -) Rh + / Rh -

Fuente: http://www.consumer.es/web/es/bebe/embarazo/tercer-trimestre/2011/11/28/204726.php

jueves, 24 de noviembre de 2011

Qué indica la forma de la tripa

¿Por qué todas las tripas de la futuras mamás son diferentes? ¿Son ciertos los mitos y dichos populares que aseguran que es posible saber el sexo del bebé observando la forma del vientre? ¿Cómo varía éste en cada trimestre?

Embarazadas

Existen muchos mitos sobre la tripa de la futura mamá: que si es redondita el bebé va a ser niña y si es picuda, niño; que cuanto mayor es el volumen de la tripa, mayor es el bebé; que si la tripa está muy alta, el niño va a nacer de pie... Todos son falsos y no hay base científica que los justifique. Sin embargo, es muy importante que el médico observe la forma de la tripa de la embarazada y que controle cómo va cambiando durante los meses de gestación, porque le ayuda a percatarse de posibles problemas y le anuncia la proximidad del parto.

VARIOS FACTORES INFLUYENTES

Desde el momento en que se produce el embarazo, el útero materno comienza a dilatarse. Y empieza a hacerlo por abajo, por la zona que está más cercana al pubis. Éste es el motivo por el que la buena nueva, de la que la madre es consciente en las primeras semanas, tarda unos meses en hacerse visible a los ojos de los demás. Y también explica por qué al principio la tripa de la embarazada tiene forma de pera y está más gordita por abajo que por arriba.

También es normal que durante el segundo semestre la tripa esté ligeramente ladeada hacia la derecha (el lado izquierdo está ocupado por el colon) y que la futura madre sienta molestias en esta zona (se deben a que el niño se ha colocado de tal forma que le está oprimiendo el hígado). Salvo que la asimetría y el dolor sean exagerados, estas alteraciones carecen de importancia.

Pero además del crecimiento del útero, hay otros muchos factores que justifica el hecho de que no haya dos embarazadas que tengan la tripa igual: que sean más o menos anchas de caderas, que estén engordando lo justo o más de lo aconsejable, que sean gorditas o delgadas de constitución, que éste sea su primer embarazo... Sin duda, las futuras mamás delgadas, las primerizas, las estrechitas de caderas y las que van a tener gemelos o trillizos tienen el vientre más pronunciado.

AL FINAL, MÁS BAJA Y OVALADA

En la forma de la tripa, lógicamente, también influyen los movimientos y la postura que adopte el bebé. Cuando sientas que tu pequeño se mueve (empezarás a notar sus cambios posturales hacia el quinto mes), di a tu pareja que te ponga las manos sobre el vientre. Será una experiencia muy emotiva para él y así le darás la oportunidad de participar más intensamente de tu embarazo.

A medida que el niño crece y va ocupando la cavidad uterina, la forma de la tripa se va haciendo más globular. Es entre las semanas 36 y 38 de la gestación cuando adquiere el mayor volumen. Cuando te encuentres en esta fase, tu tripa parecerá un auténtico globo y como se prolongará hacia la boca del estómago, oprimiéndote el diafragma, puede que te cueste más respirar. Si es así, adopta una respiración rítmica y relajada durante todo el día y si al acostarte no puedes respirar bien, duerme semiincorporada, con un almohadón en la espalda. De todos modos, esta situación no durará mucho. Al final de la gestación, entre el octavo y el noveno mes, tu pequeño se encajará; es decir, se pondrá cabeza abajo metiendo la cabeza en tu pelvis, y este cambio de postura hará que la tripa se te baje, adquiriendo una forma ovalada. Esto te permitirá respirar mejor y te anunciará que tu hijo está listo para nacer. Y lo hará en breve, tal vez en unos días.

Fuente: http://www.crecerfeliz.es/Embarazo/Seguimiento-medico/La-forma-de-la-tripa-durante-el-embarazo

viernes, 18 de noviembre de 2011

Deliciosas coronas de Navidad

Corona de Navidad de nubes y gominolas

Realizar esta corona es bastante sencillo, tan solo necesitáis una base de corona de corcho e ir pinchando en un palillo las nubes blancas, aunque es conveniente asegurarlas con un poco de pegamento (eso sí, no dejéis que se las coman luego). Aquí podéis ver el paso a paso.

Corona de Navidad de gominolas

Aquí podéis ver con detalle cómo preparar paso a paso esta corona de Navidad de gominolas, que aunque no será comestible, desde luego queda colorida y muy dulce…
Corona de Navidad de gominolas

Corona de Navidad de galletas

Martha Stewart nos enseña a preparar esta original corona de Navidad de las clásicas galletas de jengibre, tan típicas en estas fechas.

Fuente: http://www.pequeocio.com/coronas-navidad/


Corona de Navidad de galletas de jengibre